sábado, 16 de febrero de 2013

Cuánto frio hace en Saturno



Dice una canción que  “cuanto frio hace en Saturno, mi amor”, y habla de una mujer perdida y palabras de confianza del autor, diciéndole que está a su lado. Tocar fondo y seguir tocando fondo, cavar un agujero que no tiene final, una caída infinita.
No hay caída peor que aquella en la que te piden que te tires, pues te recogerán sus brazos, “confía” te dicen; y te lanzas… no hay brazos, ni manos, ni nada; solo el frio suelo y tu corazón hecho añicos. El peor sabor del mundo seguro es ese. El sentirse engañado, decepcionado, apartado. El boxeador prefiere que le golpeen en la cara a que lo hagan en el corazón, y yo también. Una nariz rota, un pómulo sangrante, un labio partido, un ojo morado, se curan rápido; pero las heridas interiores provocadas por los besos que viajaron a otra parte donde no estaba tu boca… amigo, esas heridas tardan más en cicatrizar. Te sientes solo y hundido, a mil jodidos kilómetros de la felicidad, en otro planeta. En el planeta donde en verano tienes frio y en invierno nada te calienta. En el planeta de los recuerdos criminales que te asaltan por sorpresa clavándote momentos haciéndote sangrar la memoria. En el planeta donde no se puede dormir, y que cuando por fin surge un sueño dulce, despiertas en la pesadilla de nuevo. En el planeta del que te puedes adaptar pero no sabes cuándo escaparás, o cuándo volverás de nuevo a entrar en su centro mortal. ¡Cuánto frio hace en Saturno, joder!

No hay comentarios:

Publicar un comentario